Hola qué tal, te saluda tu amiga Satya Simrat.
Hoy quiero compartirte un poema en prosa que escribí inspirada en la experiencia de meditar.
Cuando meditamos salimos de este mundo para entrar a otra dimensión.
Esto que escribo es sólo una fina muestra de cómo aveces lo vivo desde mi experiencia muy personal, pero no es una verdad ni certeza absoluta. Te invito a meditar conmigo para que descubras cómo se siente la experiencia del meditar por ti mism@a.
“Hoy desperté con el deseo de tocar las estrellas. De suspender mi mente en el centro de la habitación. Me había cansado de ver los mismos personajes en la televisión y quise entrar en ella para cambiar el canal.
Por unos minutos nada sucedió. Mi cabeza tenía por dentro el ruido estridente de un montón de latas vacías rodando por el pavimento.
Al concentrarme en la inhalación y exhalación, hubo un momento en que me ví en medio de la oscuridad. En ésta ocasión, me había visto flotando hacia ningún lugar, porque me había evaporado.
Experimenté esa oscuridad que abraza como una madre a sus hijos, donde el miedo, el espacio y el tiempo carecen de significado. Todo flotaba lejano como pompas de jabón. Vi mi pasado, presente y futuro desvanecerse en un instante. Había un vacío inmenso como un abismo que me sostenía con amor. Mis lágrimas al sentirme tocada habían fluido hacia otra dimensión, cayendo como agua de lluvia mojando a un par de amantes en un parque.
No sé si era la muerte, pero tampoco si era la vida.
Flotando en ese vacío, me vi contemplando el mar. Al acercarme me di cuenta que las gotas eran finos cristales, y cada cristal era un trozo de mi existencia no vivido. Flotaban tan sublimes, que no pude hacer nada más que tan solo mirar. Tuve la tentación de llevarme algunos de esos cristales al bolsillo, secuestrarlos para meterlos debajo de mi almohada y contemplarlos cada noche cuando no pueda dormir. Pero al tomarlos en mis manos, se caían entre mis dedos de las manos, como cuando agarras puños de arena y se desvanecen.
Mi Ser entonces comprendió que sólo se trataba de la contemplación con los ojos del alma de lo que sea que topes dentro de ese mundo desconocido y que nunca podrás atrapar. Ni siquiera en este poema. Ni siquiera en una canción. Ni siquiera en el pensamiento.”
Haz experimentando alguna vez el sentir que entras a otra dimensión con la meditación? Cuéntame tu experiencia en los comentarios.
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