Hola, te saluda de nuevo tu gran amiga Satya Simrat (Alma Benítez).
Si estás leyendo este post, probablemente estás en tu autodescubrimiento o estás por iniciar. Bienvenid@!
Hace unos días escuchaba una charla de un psicólogo llamado Valentín Méndez próximo a ser mi mentor, y que me inspiró muchísimo. Él hacía esta pregunta: ¿Y si nos damos amor a nosotros mismos solo por el hecho de existir?
¿Cómo tratas a alguien que se siente triste, temeroso o con miedo? Solemos tratar a esa persona con amor, dándole ánimos, abrazarla, tratarle con cariño. Situ te equivocas ¿te tratas igual que como tratas a esa persona?
Cuando somos pequeños, sin el amor de nuestros padres simplemente no sobreviríamos, y esa dependencia a la edad temprana es realmente vital porque estamos creciendo y aprendiendo a ver el mundo. Por diversas situaciones, se nos queda grabada una voz que puede ser de algún familiar o de profesores, o de personas externas a nuestra familia que alguna vez nos regañaron por algo que no hicimos bien. Y esa voz permanece ahí como nuestro peor verdugo.
¿Cómo podemos cultivar nuestro amor propio?
Una de las cosas que propone Valentín es que reemplacemos nuestra voz juzgona interior. Seguramente ya sabes a qué me refiero: Es esa voz que te descalifica, que te exige perfección, que te regaña, que te dice que todo en ti está mal. Una vez que la identificamos, lo siguiente es que cultivemos una práctica que nos ayude a transformarla en una voz tierna, abrazadora, amorosa. Si tienes hijos, es exactamente esa hermosa voz que utilizas para hablarles: con amorcito, afecto, ternura.
Probablemente tal vez habrás visto muchísimo que el amor propio también se refiere a alejarnos de situaciones, de cosas, música o de personas que no nos nutren. El aprender a cultivar esa voz compasiva en nuestro interior nos va a ayudar aún más a identificar todas esas cosas, porque todo aquello que no te recuerde al amor y al cariño que tu te cultives dentro, sonará como algo hueco o tosco y te será más sencillo alejarte de ello.
Si deseas cultivar ese amor en ti, te invito a iniciarte en la meditación en un reto virtual que inicia el lunes 9 de agosto al domingo 15. Puedes unirte desde este link:
Te invito también a tomar la siguiente meditación de mi maestro de meditación Salvador González Ramírez acerca de la figura compasiva que se ha convertido en mi favorita y en lo personal es una luz en mi camino. La escucho cada vez que empiezo a sentir que necesito amor y calor en el corazón.
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